[Español] Introducción: El trasplante renal está asociado a un aumento de la calidad de vida, así como del descenso en la mortalidad de los pacientes con insuficiencia renal crónica en estadio terminal, cuando se compara con los pacientes en diálisis, pero debido a la escasez actual, los equipos de trasplante han tenido que replantearse la búsqueda de nuevas fuentes de órganos como el uso de los donantes vivos. Material y Métodos: Este es un estudio descriptivo de corte transversal, donde incluimos 46 casos sometidos a nefrectomía laparoscópica para donación renal, en el periodo comprendido desde enero 2017 hasta diciembre de 2020. Resultados: El 76% de los pacientes corresponden al sexo femenino, entre el rango de edad con mayor donación lo comprende el grupo de edades entre 30-39 años. El riñón donado con mayor frecuencia fue el izquierdo con un 76%. La tasa global de supervivencia fue del 100%con una tasa de complicaciones de 11%, entre ellas predominando las complicaciones vasculares. Discusión: La nefrectomía laparoscópica para donación renal es un procedimiento seguro, con una alta tasa de supervivencia, baja tasa de morbilidad y con buenos resultados funcionales renales.
[English] Introduction: Kidney transplantation is associated with an increase in quality of life, as well as a decrease in mortality in patients with end-stage chronic renal failure, when compared to patients on dialysis, but due to the current shortage, Transplant teams have had to rethink the search for new sources of organs such as the use of living donors. Material and Methods: This is a descriptive cross-sectional study, where we included 46 cases undergoing laparoscopic nephrectomy for kidney donation, in the period from January 2017 to December 2020. Results: 76% of the patients correspond to the female sex, the age group with the highest donation is comprised of the age group between 30-39 years. The most frequently donated kidney was the left with 76%. The overall survival rate was 100% with a complication rate of 11%, among them vascular complications. Discussion: Laparoscopic nephrectomy for kidney donation is a safe procedure, with a high survival rate, low morbidity rate and good renal functional results
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